Solo en Granada, una media de cuatro mil animales domésticos son abandonados cada año en mitad de la calle.
El Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil ha puesto a disposición judicial al propietario de un perro, acusado de tener al animal durante varios meses encadenado en un establo sin posibilidad de que el can pudiera moverse. El Seprona abrió una investigación después de recibir una denuncia de una mujer extranjera con domicilio en la comarca de Huéscar, quien advirtió de las lamentables condiciones en las que se encontraba el animal.
Los agentes de la Guardia Civil pudieron comprobar in situ que el perro llevaba meses –aunque no se especifica el número sí se utiliza la palabra en plural– atado con una cadena a un palo en un establo.El animal tenía la parte del cuello ensangrentada y con heridas profundas, provocadas por la cadena que llevaba. Además de estas heridas, el perro se encontraba famélico, con claros signos de malnutrición. El caso se instruye en un juzgado de Huéscar y de momento el animal ha sido retirado a su propietario.
Hasta hace muy poco tiempo, el juez necesitaba acreditar que había ensañamiento con un animal para dictar una sentencia condenatoria contra el presunto maltratador, pero la última modificación del Código Penal permite castigar a los imputados por este tipo de delito sin necesidad de tener que demostrar la existencia de ensañamiento.
Este delito puede acarrear una pena de entre tres meses y un año de cárcel, conmutables por una multa en el caso de que el agresor tenga el certificado de antecedentes penales inmaculado.
El Seprona investigó durante el año 2010 seis casos de maltrato animal en la provincia de Granada, de los cuales cuatro se pudieron esclarecer y acabaron con sanciones económicas dirigidas a los propietarios. A este servicio de la Guardia Civil llegan los casos más extremos, porque muchas veces las asociaciones defensoras de los derechos de animales carecen de medios para cursar las correspondientes denuncias por maltrato y después defenderlas en los tribunales.Los casos de ensañamiento con perros y gatos son los más frecuentes.
La Audiencia Provincial de Granada condenó por maltrato animal el pasado 3 de noviembre a un policía local de Puebla de Don Fadrique que mató de un disparo a un perro pequinés que se encontraba durmiendo en la puerta de entrada de la vivienda de su dueño, hechos por los que tendrá que hacer frente al pago de una multa de 600 euros, y a una indemnización de otros 225 euros al propietario del perro.
«A nosotros nos llegan cada año decenas de denuncias por maltrato pero no tenemos abogados ni medios para llevarlas a los tribunales y ejercer su defensa.
Nos hemos encontrado con casos espeluznante en esta provincia, por ejemplo, un perro al que le metieron un petardo encendido en la boca y le explotó, otros que aparecen con perdigonazos, los que han sido atropellados y abandonados a su suerte... sin olvidar que el mero hecho de tener un animal doméstico y no llevarlo al veterinario o cuidarlo como es debido ya es signo de maltrato animal».
Las palabras son de Laura Pérez, responsable de adopciones de la asociación Ladridos Vagabundos, una oenegé dedicada a la defensa de animales y recogida de los mismos cuando son abandonados, funciona desde el año 1998 en la provincia de Granada.
Las organizaciones en defensa de los derechos de animales calculan que cada año son maltratados en España unos sesenta mil animales en fiestas populares y que unos doscientos mil perros y gatos son abandonados cada año por sus dueños, un abandono medio de dos mascotas cada hora.
El ensañamiento conoce a veces de una extraordinaria crueldad, por diversión o sadismo, durante el transporte, la caza, o el entrenamiento para espectáculos, siendo muchos de estos animales llevados hasta la extenuación, mutilación, desnutrición o incluso la muerte.
Cuatro mil abandonos.
Granada no se salva de la epidemia nacional de abandonos de animales domésticos. Una media de cuatro mil, entre perros y gatos de forma mayoritaria, se quedan cada año en la calle, la mayoría de ellos acaban sacrificados en las perreras municipales. «A nosotros nos llegan cada día una media de dos o tres perros abandonados, lo cual nos hace pensar que solo en Granada la cifra de abandonos diarios está entre 10 y 15 animales», señala Ángel Garach, responsable de la protectora de animales san Francisco de Asís, con sede en Fuente Vaqueros. Esta importante cantidad obliga a las perreras a sacrificar a buen número de estos animales domésticos por la incapacidad de poder darle cobijo en sus centros.
Fuente: ideal.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario